Mensajes de diversas orígenes
jueves, 17 de julio de 2025
En el Amor Abandonarás el Odio que se ha Acumulado, y que, a través de Tus Ofrendas a Nuestros Sagrados Corazones, Desaparecerá para Siempre
Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo y de Nuestra Señora a Gérard en Francia el 16 de julio de 2025
Virgen María:
Mis queridos hijos, volved a Dios, pues la victoria está en vuestras manos. No dudéis, pues con vosotros venceremos al Mal, que no cesa de invadir las almas y los corazones y que impide la reconciliación con Dios en Sus Tres Personas. Sí, Mis queridos hijos, depende únicamente de vosotros el quererlo. Uno y uno son dos, y uno y dos son tres; así pues, debéis intervenir en Nuestro favor, dejando a un lado los deseos que no proceden de Nosotros. Amén †
Jesús:
Mis queridos hijos, Mis Amigos, renunciad al Maligno, dejad atrás lo que no procede de Nosotros, pues se acerca el tiempo tan esperado en que el Mal será destruido. Os invito a la Penitencia, a olvidar las disputas que podáis tener entre vosotros. El Mal ha invadido toda la tierra. Sabedlo, y dad a Dios el primer lugar, y así adoraréis a Dios y no al Mal.
Como hijos de la gracia, esto es lo que os ofrezco: convertiros en verdaderos hijos de Dios, hijos llenos de Amor, de Amor por Mi Nombre, por Mi Padre, por Nuestro Espíritu; ese Espíritu que dio origen a todo lo que procede de Dios. En el Amor abandonaréis el odio que se ha acumulado y que, a través de vuestras ofrendas a Nuestros Sagrados Corazones, desaparecerá para siempre.
Ha llegado el momento de que os unáis a Nuestros Sagrados Corazones, volviéndoos puros y libres de toda adversidad, pues lo Divino no es una porción de miedo, sino la plenitud de la Paz. A través de vuestros corazones unidos a los Nuestros, participaréis en la Victoria, y esta victoria os es concedida por la suprema Bondad deseada desde el principio de los tiempos.
Amad, orad y convertíos en verdaderos hijos, hijos llenos de gracia santificante. Amén †
Jesús, María y José, Os bendecimos en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Convertíos, en Abandono, en hijos obedientes a Nuestras Palabras, y venceremos. Amén †
«Consagro el mundo, Señor, a Tu Sagrado Corazón»,
«Consagro el mundo, Virgen María, a Tu Inmaculado Corazón»,
«Consagro el mundo, San José, a Tu paternidad»,
«Te consagro el mundo, San Miguel, protégelo con Tus alas». Amén †
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